Dr. Fil Flores

Mi hija Astrid Santiago Santos tenía 15 años cuando en agosto del 2019 en su segundo día de regresar a la escuela me indicó que sentía mucho dolor en sus pies, al verlos estaban hinchados, al día siguiente regresó a la escuela y al mediodía me llamó que necesitaba ayuda que no podía caminar, cuando la buscamos fuimos con un sillón de ruedas y desde ese día comenzó a sufrir de perdida de la sensación en sus piernas lo cual se convirtió en nuestra pesadilla. Estuvo hospitalizada por 1 semana donde le realizaron varios exámenes entre ellos los de punción lumbar, CT scan, MRI entre otros, ella sufrió mucho en ese proceso pero no dieron ninguna razón. 3 meses de ese difícil proceso un lunes 25 noviembre 2019 fuimos a la iglesia para hablar con el Pastor/sacerdote P. Manuel Holguin el cual nos recomendó visitar al Dr Filiberto Flores ya que en ningún momento un quiropráctico la había evaluado; la semana antes el neurólogo nos dijo que no había forma de saber que ocurrió y cuando mejoraría, que podría durar por siempre. Recuerdo que el sacerdote le dijo a Astrid:"Nos vemos el sábado caminando". El 30 de noviembre de 2019 fue nuestro encuentro con el Dr Filiberto Flores, fuimos pensando en que sería como en otras visitas que solo le aliviaban el dolor temporeramente pero se quedaba en el mismo estado sin resolver el problema. Llegamos ese sábado a su oficina Astrid con muy poca ilusión, Filiberto nos llama a entrar a la oficina comenzó a dialogar con Astrid mientras le colocaba sus agujas de acupuntura, luego comenzó a hacer lo que él mejor sabe hacer, recuerdo que me dijo que me acercara a la nena para ayudarle a mover una de sus agujas mientras él le masajeaba las piernas, luego de unos minutos ella comenzó a reírse y a decir que estaba comenzando a sentir sus piernas, ella comenzó a llorar. Filiberto logró lo que ningún médico había logrado durante 3 meses, él con sus manos santas y su amor a lo que hace le devolvió las esperanzas a esa joven soñadora y como P. Manuel dijo así fue, ese mismo sábado fuimos a misa y la vio caminando. Desde entonces cada vez que ella siente que sus piernas le van a fallar, rápido le envía un mensaje a Filiberto para que le atienda.